Aunque hoy en día la delincuencia está a la orden del día, tú puedes protegerte adoptando ciertas medidas que te ayudarán a detectar y evitar ser víctima de los fraudes inmobiliarios. Comprar o rentar una propiedad sin caer en estafas sí es posible. Descubre a continuación cómo.

No te fíes de las apps o redes sociales

La tecnología hace mucho por nosotros con redes sociales y aplicaciones útiles para la búsqueda de propiedades en venta o renta, pero debido al alto número de personas que las utilizan se hace muy complicado certificar que todas estén 100% en regla. Debes tener cuidado sobre todo de compartir tus datos, de hacer depósitos y de visitar lugares sin antes haber investigado bien. 

Hay muchas modalidades de fraude en redes y apps, así que úsalas como orientación, pero nunca tomes una decisión basada solo en lo que ves en tu teléfono.  

Investiga la propiedad

Una vez que hayas encontrado la casa que te gustaría comprar, tómate el tiempo de investigarla. Esta es la mejor forma de protegerte. Primero haz una visita física en la que puedas hablar con el dueño o encargado, estás en tu derecho de pedirle toda la información que necesites: INE, contrato, referencias e incluso documentación de la propiedad. 

Luego debes solicitar ayuda de un notario, él se encargará de verificar que la situación de ambos sea legal. Finalmente, revisa el estado físico de la casa, hacer esto te evitará sorpresas desagradables que te hagan querer dejarla.  

Revisa el contrato

Si has seguido los pasos anteriores, es momento de verificar que en el contrato no haya nada que juegue en tu contra. La compra-venta y renta de inmuebles es como cualquier otro negocio, se ofrece un bien y se paga algo a cambio: hay derechos y obligaciones involucradas. La función del contrato es hacer que la transacción sea justa, además de protegerte a ti y al arrendador bajo un común acuerdo de respeto. Lo más recomendable es llevar el contrato con el notario y firmar copias para ambas partes.

El momento de los pagos

Solo cuando estás de acuerdo con todas las cláusulas del contrato, con la legalidad de la propiedad y de su buen estado, debes hacer el pago. Antes de dar cualquier anticipo, asegúrate de que la empresa es fiable y de que tienes un broker inmobiliario cercano y de confianza. Recuerda que, una vez hecha una transferencia, no podrás recuperar tu dinero.